Después de las elecciones judiciales del 1 de junio, mucho se ha dicho que ahora le toca a Jalisco preparar la elección que será en 2027. Sin embargo, en el Congreso del Estado no hay ni la más mínima intención de iniciar una negociación y mucho menos revisar las propuestas para la reforma del Poder Judicial del Estado.
Quienes tuvieron más prisa por realizar una reforma judicial y preparar de inmediato las elecciones, fueron los integrantes de la bancada de Morena, pero su intención no prosperó.
De hecho son tantas las propuestas de reforma judicial, que lo difícil es encontrar acuerdos. Esto llevó a la reducción de un listado de al menos 10 puntos de discusión, pero el gran obstáculo, básicamente, es introducir o no un sorteo, una tómbola, para elegir candidatos.
El gobernador del Estado, Pablo Lemus, está totalmente en contra, pero los diputados de Morena defienden a capa y espada esta figura como parte esencial de sus reglas de operación desde el periodo de Andrés Manuel López Obrador.
En palabras del diputado coordinador de Morena, Miguel de la Rosa, ellos pueden aceptar que haya reglas para calificar candidaturas, como por ejemplo la aplicación de exámenes de conocimientos, o también el currículum que garantice experiencia en materia judicial, pero después de esto exigirían que sí se establezca el sorteo. Es un tema de “honor morenista”.
El problema principal es que la elección de 2027 se ve todavía muy lejana, y hay tantos temas que atender y resolver, que no está en el ánimo de ninguna de las bancadas impulsar la reforma judicial. No por ahora.
De hecho, en el Congreso del Estado se está convirtiendo en costumbre, si no es que regla, reaccionar a la urgencia, no prevenir.
Lo que está en puerta en este momento es la reforma en materia de transparencia, porque antes de que termine el mes de junio, deberá haberse aplicado la reforma constitucional en la materia, que implica la desaparición del ITEI.
Faltan diputados que se interesen en el tema judicial. Aunque parezca lejano el año 2027, para la siguiente elección el tiempo no es tanto si se pretende hacer las cosas con orden, buscar conciliación social y particularmente, una modificación profunda del Poder Judicial, que deje satisfechos a todos los sectores jaliscienses.
Si el Gobierno del Estado, es decir, el Poder Ejecutivo, no aprieta las tuercas y empuja la reforma, ésta no va a pasar en el Congreso local, así que elecciones judiciales, ya será para después.